Con un ansia insana de besar tu cuello
me embriago en tu aroma y corro tus cabellos,
como un cruel vampiro ansiando morderte,
tal vez es mi abrazo demasiado fuerte.
Parece tu cuello ser de porcelana.
Lo beso en silencio y mis ansias se inflaman.
Lo rozan mi lengua, mis labios posesos,
sintiendo en el roce el sabor al deseo.
Acaso yo tenga sueños de vampiro,
o tan sólo ansíe lo eterno contigo,
pero no es tu sangre que inspira mis sueños,
es sólo el anhelo de besar tu cuello.
Que cuando lo beso deslizan tus prendas
y el rubor te cubre al subir por tus piernas,
tus palabras dicen cosas sin sentido
y el código entiendo que hay en tus suspiros.
Y se abre un portal de mágicos mundos
cuando incursiona mi cuerpo sobre el tuyo.
Y todo principia, no hay duda en ello,
cuando yo comienzo a besar tu cuello.-
ALDO R. GUARDATTI
me embriago en tu aroma y corro tus cabellos,
como un cruel vampiro ansiando morderte,
tal vez es mi abrazo demasiado fuerte.
Parece tu cuello ser de porcelana.
Lo beso en silencio y mis ansias se inflaman.
Lo rozan mi lengua, mis labios posesos,
sintiendo en el roce el sabor al deseo.
Acaso yo tenga sueños de vampiro,
o tan sólo ansíe lo eterno contigo,
pero no es tu sangre que inspira mis sueños,
es sólo el anhelo de besar tu cuello.
Que cuando lo beso deslizan tus prendas
y el rubor te cubre al subir por tus piernas,
tus palabras dicen cosas sin sentido
y el código entiendo que hay en tus suspiros.
Y se abre un portal de mágicos mundos
cuando incursiona mi cuerpo sobre el tuyo.
Y todo principia, no hay duda en ello,
cuando yo comienzo a besar tu cuello.-
ALDO R. GUARDATTI
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