Oculta
entre trastos, escoba y plumero,
sin
cobrar dinero la vida la pasa
como
una desgracia do todos sus sueños
de
a poco murieron… ¡Pobre ama de casa!
Y
pasan los días, los años, los lustros
en
un trance injusto, sin nimia licencia,
y
así es la sirvienta que tras de los muros
no
tiene futuro, tan sólo paciencia.
Antepone
siempre intereses ajenos
por
sobre sus sueños, que mueren de frío.
Así
su marido se cree su dueño,
y
desde pequeños le ordenan los hijos.
El
tiempo discurre, y las ilusiones
que
tuvo a montones con su piel aún tersa,
quedaron
inmersas tras obligaciones
fijadas
por hombres en época incierta.
Para
ella no existen domingos, feriados,
no
hay día de descanso, no hay vacaciones…
si
sufre dolores, procura ignorarlos
y
ahoga su llanto sola, en los rincones.
¡Aún
bulle su sangre! Tiene fantasías,
mas
sólo es su vida la ruta a una caja.
Tal
vez con nostalgia a veces suspira
ansiando
otra vida ¡Pobre ama de casa!
(Del libro "Despreciados y Despreciables"
Autor: Aldo Guardatti)
Muy bueno !!!!🌹
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