Hay
un sollozo en el alma
de
mi América latina
por
la destrucción de sueños
y
el arrebato de vidas,
porque
pronuncia discursos
atestados
de mentiras
un
badulaque ignorante
que
inspira lástima y risa.
Cada
lágrima de América
es
una vida perdida
de
un hijo de Venezuela
sin
razón que justifica,
es
una sombra de luto
que
surge en una familia
por
sueños que no serán,
por
la alegría que expira.
Lágrimas
por los soldados,
también
por la policía
que
obedeciendo a un tirano
contra
el hermano se irritan.
Lágrimas
por los demonios
a
que el terror habilita
a
sembrar muerte en las calles
con
bien pagadas consignas,
por
tanta desesperanza,
por
la miseria que indigna
y
porque acallar pretenden
los
pedidos de justicia.
Lágrimas
porque entre hermanos
se
agreden y se lastiman,
mientras
que el gran delincuente
vocifera
en las tarimas,
con
pavor porque los hechos
su
fin próximo le indican.
¡Ánimo,
Venezolanos!
Que
la esperanza aún palpita
de
un futuro en libertad,
sin
criminales que opriman.-
ALDO R. GUARDATTI
(Todos los derechos reservados)
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